Por: Vincenzo Di Marzo, Nunzio Sepe, Luciano De Petrocellis, Alvin Berger, Gayle Crozier, Ester Fride & Raphael Mechoulam.
El descubrimiento del cannabinoide endógeno N-araquidonoiletanolamina (anandamida) y otras N-aciletanolaminas (NAE) en el chocolate ha llevado a la especulación de que las supuestas propiedades gratificantes del cacao se deben a la presencia de compuestos “que podrían actuar como imitadores de cannabinoides”. Esta observación plantea algunas cuestiones importantes. Primero, ¿están las NAE y la anandamida, o el “endocannabinoide” 2-araquidonoilglicerol (2-AG), presentes en los alimentos de consumo generalizado (como la leche) que son menos “gratificantes” que el chocolate? Y segundo, ¿en qué medida estos compuestos llegan al torrente sanguíneo y ejercen efectos farmacológicos cuando se consumen por vía oral? Creemos que el contenido de endocannabinoides en los alimentos, y en el cacao en particular, no es suficiente para producir efectos similares al cannabis en los mamíferos.
Procedimiento
Purificamos NAE y 2-AG de varios alimentos (incluida la leche humana madura, bovina y de cabra, y cacao en varias etapas de procesamiento) y los cuantificamos mediante cromatografía de gases y espectrometría de masas. La leche fue el único alimento analizado en el que se encontró un endocannabinoide, 2-AG, en concentraciones relativamente altas (0,33 ± 0,11 μg ml − 1 en la leche materna, por ejemplo). El nivel de NAE varió entre 0,003 y 0,024 μg ml-1, siendo la anandamida el compuesto menos abundante. También estuvo presente la oleamida, una sustancia inductora del sueño4 que inhibe la hidrólisis de anandamida5,6 (0,055-1,27 μg ml − 1).
En muestras derivadas de cacao, detectamos NAE (0,01-5,8 μg por g) y oleamida (0,17-6,0 μg por g), pero muy poca o nula anandamida y nada de 2-AG. Los niveles de NAE son mucho más bajos en los granos de cacao sin fermentar que en el cacao en polvo (que contenía menos de 0,003 μg por g de anandamida). Por tanto, pequeñas cantidades de anandamida en el cacao podrían explicarse como artefactos de procesamiento. Como todas las plantas superiores, las plantas de cacao no pueden sintetizar ácido araquidónico o sus derivados. En particular, en su contenido de NAE y oleamida, el cacao y el chocolate amargo son similares a otros alimentos de origen vegetal (como soja, avellanas, avena y mijo), en los que detectamos hasta 2,3, 1,1 y 2,8 μg por g de oleamida, N- oleoil-etanolamina y N-linoleoil-etanol-amina, respectivamente.
Para determinar si los endocannabinoides sobreviven a su paso por el sistema digestivo, analizamos la anandamida y el 2-AG después de la administración oral en una serie de pruebas in vivo que se utilizan ampliamente para evaluar la actividad cannabimimética (Tabla 1). Los dos compuestos fueron activos en cuatro de las cinco pruebas de comportamiento, pero solo en concentraciones muy altas en relación con las de los alimentos. Por el contrario, una dosis más pequeña del componente psicoactivo de la marihuana, (-) – Δ9-tetra-hidrocannabinol (Δ9-THC), fue suficiente para dar un efecto fuerte en todas las pruebas.
Debido a que la anandamida intraperitoneal y el 2-AG son activos en las mismas pruebas en dosis de 20 a 60 veces menores, estos resultados indican que solo el 1.6-5% de los compuestos administrados por vía oral ingresan al torrente sanguíneo, probablemente debido a los altos niveles en el tracto gastrointestinal de la enzima amida hidrolasa de ácido graso, que cataliza la hidrólisis de ambos compuestos. Por lo tanto, es poco probable que las cantidades de anandamida y 2-AG que se encuentran en los alimentos sean suficientes para producir efectos psicotrópicos observables. No probamos otras NAE insaturadas que se ha sugerido que mejoran la actividad de la anandamida endógena al inhibir su inactivación, sino que analizamos la oleamida, para la cual este tipo de acción también está respaldada por datos farmacológicos. De nuevo son necesarias altas dosis orales para que se observe la actividad in vivo (Tabla 1).
Resultados
Nuestros resultados muestran que las cantidades de anandamida, 2-AG y oleamida en los alimentos, incluida la leche y el cacao, son varios órdenes de magnitud inferiores a las requeridas, si se administran por vía oral, para llegar a la sangre y provocar efectos “centrales” observables. Los ensayos utilizados aquí proporcionan una evaluación general de la actividad cannabimimética, y se necesitan pruebas que monitoreen cambios de comportamiento más sutiles que podrían ser inducidos por dosis orales bajas de NAE / oleamida antes de la relevancia de estos compuestos para los supuestos efectos de recompensa leve e inductores del deseo de el cacao se puede descartar. También se debe investigar la presencia en la leche de 2-AG (que puede liberarse de los triglicéridos durante la digestión) y oleamida.
Artículo original: Di Marzo, V., Sepe, N., De Petrocellis, L. et al. Trick or treat from food endocannabinoids?. Nature 396, 636 (1998). https://doi.org/10.1038/25267
Referencias:
Devane, W. A.et al. Science 258, 1946–1949 (1992).
di Tomaso, E., Beltramo, M. & Piomelli, D. Nature 382, 677–678 (1996).
ADS CAS Article Google Scholar
Mechoulam, R.et al. Biochem. Pharmacol. 50, 83–90 (1995).
Cravatt, B. F.et al. Science 268, 1506–1509 (1995).
Mechoulam, R.et al. Nature 389, 25–26 (1997).
Bisogno, T.et al. Eur. J. Biochem. 254, 634–642 (1998).
Cook, H. W. Biochemistry of Lipids, Lipoproteins and Membranes 141-169 (Elsevier, Amsterdam, 1991).
Martin, B. R.et al. Pharmacol. Biochem. Behav. 40, 471–478 (1991).
Fride, E. & Mechoulam, R. Eur. J. Pharmacol. 231, 313–314 (1993).
Katayama, K.et al. Biochim. Biophys. Acta 1347, 212–218 (1997).